METAS, OBJETIVOS Y RESULTADOS CLAVE
En boletines anteriores hablamos sobre las preguntas fundamentales que se hacen los empleados (en el primero) y sobre cómo el direccionamiento estratégico logra que todos vayan para el mismo lado (en el segundo):
- ¿A dónde vamos?
- ¿Qué se espera de nosotros?
- ¿Cómo lo estamos haciendo?
- ¿Qué me queda de esto?
- ¿A quién puedo acudir si necesito ayuda?
En esta ocasión, nos centraremos en la segunda pregunta: ¿qué se espera de nosotros?
Como vimos en el boletín anterior, el direccionamiento estratégico de una empresa debe definir y comunicar sus metas y objetivos generales, de modo que cada persona entienda cómo su trabajo contribuye a alcanzarlos. El siguiente paso es definir los resultados clave que cada grupo o persona debe obtener para lograrlo.
Para ello, se recomienda seguir el siguiente proceso:
Determinar las actividades necesarias para que el trabajo de cada grupo o individuo contribuya al cumplimiento de las metas y objetivos estratégicos.
Definir los objetivos específicos de cada actividad, asegurándose de que sean SMART (por sus siglas en inglés):
- Specific (Específicos): Qué se debe hacer y cómo.
- Measurable (Medibles): Con comportamientos observables, cantidades específicas, niveles de calidad definidos, tiempos determinados, eficiencias establecidas, etc.
- Achievable (Alcanzables): Que estén dentro del ámbito de autoridad, control e influencia de la persona o equipo, y que cuenten con los recursos, soporte, certificaciones o licencias requeridas.
- Realistic (Realistas): Viables dentro del tiempo y recursos disponibles. Se deben considerar los prerrequisitos necesarios para cumplir con el objetivo.
- Time-bound (Limitados en el tiempo): Que tengan un plazo específico de cumplimiento.
Verificar que los objetivos estén alineados con las metas estratégicas.
- Descartar a los que no lo estén.
- Identificar los resultados clave, es decir, los objetivos que más directamente contribuyen al direccionamiento estratégico.
Comunicar los objetivos y resultados esperados al equipo, asegurándose de que sean RUMBA (por sus siglas en inglés):
- Realistic (Realistas): Alcanzables, aunque representen un reto.
- Understandable (Comprensibles): Comunicados con claridad; se debe verificar la comprensión con preguntas.
- Meaningful (Significativos): Mostrar por qué ese objetivo es importante y cómo su cumplimiento aporta al logro de metas generales, así como al desarrollo o reputación del equipo o individuo.
- Behavioural (Comportamentales): Especificar cómo debe comportarse la persona para lograr el resultado.
- Aligned (Alineados): Explicar cómo el objetivo se relaciona directamente con el direccionamiento estratégico.
Consideración importante: El proceso de definir metas, objetivos y resultados clave es mucho más efectivo cuando se realiza con el equipo de trabajo, ya que no solo se fomenta el compromiso, sino que permite identificar barreras que se puedan oponer al éxito, como:
- Falta de recursos adecuados: conocimiento, entrenamiento, equipos, materiales, etc.
- Conflictos de interés o agendas personales.
- Situaciones en otras áreas que puedan afectar el proceso.
- Prerrequisitos que podrían fallar o no cumplirse a tiempo.