Las mipymes representan el 90 % del sector productivo total nacional y, de acuerdo con el Centro de Estudios Económicos – ANIF- las micro, pequeñas y medianas empresas suman el 99 % del tejido empresarial, aportando alrededor del 40 % del PIB.
A pesar de este panorama, la Asociación Colombiana de Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (ACOPI) indicó en su más reciente reporte que la mitad de las mipymes quiebran después del primer año y solo un 20 % de las mismas sobrevive al tercero.
Esta situación pone en desequilibrio no solo a la industria, en distintos sectores, sino también la empleabilidad y la economía nacional.
Según Juan Tamayo, vicepresidente Comercial de Pequeñas y Medianas Empresas de DataCrédito Experian, uno de los burú más grande del mundo en ventas, con presencia en 44 países, no tener una buena administración de los recursos y tomar decisiones de alto riesgo, al querer crecer la venta, ampliar mercado, explorar nuevos puntos de venta o nuevos nichos de mercado sin tener herramientas que permitan identificar los niveles de deuda o el comportamiento de pago de las personas y las empresas respecto a la antigüedad y buen manejo de sus obligaciones financieras, son algunas de las razones por las cuales una mipyme puede atravesar periodos de inestabilidad en el mediano y largo plazo.
Recomendaciones para que los micro, pequeños y medianos empresarios tengan un correcto dominio de la vida crediticia:
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