Artículo escrito por Sisandes

Si bien se ha visto como la tecnología avanza y se desarrollan nuevas máquinas y sistemas basados en la Inteligencia Artificial, es más el camino que queda por recorrer que lo que se ha avanzado hasta ahora.

La diferencia abismal entre el ser humano y la IA es la ética y la moral, si bien se ha venido avanzando en la creación de softwares y máquinas que “tomen decisiones morales por sí solas”, se ha visto como la resolución de los dilemas se ve directamente impactada por el pensamiento o los sesgos que tengan los seres humanos de los cuales aprender el respecto aparato de IA.

Algunos de los dilemas éticos que plantea el uso de la IA son:

El Gran Hermano: La información personal de las personas que se ha ido recopilando gracias a los buscadores y los usos de las herramientas de navegación que, si bien facilitan las actividades diarias, no se sabe hasta qué punto se pierde la privacidad.

Perpetuación de sesgos: Los algoritmos son mecanismos mediante los cuales se programan las máquinas con el fin de que hagan predicciones más acertadas basado en tendencias, pero también se plantea la ambivalencia si estos pudieran llegar a profundizar factores de discriminación.

Desplazamiento laboral: Conforme la IA va reemplazando el uso de herramientas, también lo hace con la fuerza de trabajo. Esto puede llegar a ocasionar una oleada de desempleo en las cuales incluso existirán trabajos que desaparezcan.

Dilemas éticos complejos: Existen diferentes campos como en la medicina en donde se plantean escenarios complejos de toma de decisiones con el fin de buscar el bien común. Este ha sido uno de los grandes interrogantes de cómo decidiría una máquina de inteligencia artificial.

Y usted ¿Cómo creer que decidiría un coche autónomo antes un inminente accidente? ¿Salvaría al pasajero que lleva dentro de sí o al externo?

Fuentes: 

• magnet.xataka
• blogs.elconfidencial
• www.elmostrador.c
• www.eltiempo.com
• www.businessinsider.es
• blog.orange