La desigualdad en el sistema educativo colombiano

Noviembre 08, 2021
Café Séneca, Ecoandinos
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El grupo de desigualdad de Café Séneca, en alianza con los capítulos de economía (Ecoandinos) y ciencia política (Poliandes), organizó un conversatorio sobre el impacto de la desigualdad generado por el sistema educativo colombiano. Allí los panelistas invitados socializaron sus argumentos sobre las causas de la desigualdad en la educación y sus propuestas para mitigarla.

El primer invitado fue Moisés Wasserman, profesor, escritor, investigador y ex rector de la Universidad Nacional de Colombia. En su intervención, destacó la importancia de reconocer los progresos que se han conseguido en las últimas décadas para poder entender el panorama que estamos viviendo a nivel educativo en el país.

De acuerdo con él, el sistema educativo colombiano actual tiene sus bases en la Constitución del 91, en donde se estableció la libertad de enseñanza, la educación como derecho del individuo y promoción de la ciencia y la cultura.

También se creó la Ley General de la Educación. En este punto la educación es catalogada como un servicio prestado por el Estado por 10 años, uno de transición y nueve de básica. Por otro lado, se creó la Ley de la Educación Superior, los organismos de apoyo (CESU, ICFES, ICETEX), el viceministerio y el sistema de calidad.

El profesor Wasserman destacó los siguientes logros:

  • En 2018 el índice de analfabetismo descendió a 5,2 %
  • Cobertura de básica (primaria 5, secundaria 4) alrededor de 100 % y gratuita.
  • Cobertura del 53 % en Educación Superior
  • Hay 162.000 docentes universitarios, 13.000 con doctorado, 61.000 con maestría y 47.000 con especialización.
  • Más de 3.000 grupos de investigación consolidados.

Sin embargo, indicó que, a pesar de estos logros, hay “un vaso medio vacío” porque hay una inequidad considerable en el acceso a la educación. Por ejemplo, la educación en la primera infancia y la educación media es insuficiente con respecto al número de habitantes y hay una escasa diversidad de opciones para los jóvenes. Resaltó cómo 7 de cada 10 niños de primera infancia entran a la primaria en situación de desventaja cognitiva, debido a la desnutrición, tanto de ellos como de las madres.

“La única forma para que la educación sea efectivamente un motor de equidad y de movilidad social es si hay una calidad equivalente para todo el mundo. No es suficiente tener solo una oportunidad. Es importante que esa calidad se refleje en una oportunidad”, comentó.

Para él, hay muchas cosas que han mejorado, pero aún faltan retos que debemos superar para tener un mejor sistema educativo y enfrentar la inequidad. El primero es que debemos terminar algunas tareas pendientes, como mejorar la cobertura y la calidad de la educación.

Otro de los retos es entender que las pedagogías cambian dependiendo de las generaciones, que a las herramientas y tecnologías hay que darles un buen uso y que es fundamental crear programas educativos acorde a los trabajos del futuro.

El segundo invitado fue Leopoldo Fergusson, director del Centro de Estudios sobre Desarrollo Económico (CEDE) y profesor titular de la Facultad de Economía de la Universidad de los Andes.

Fergusson se refirió principalmente a lo que él denomina la “trampa de la debilidad de los bienes públicos”. Cuando en países en vía de desarrollo hay una baja oferta de bienes públicos porque son insuficientes o son de baja calidad, las personas, quienes tienen suficiente poder adquisitivo, optan por una provisión privada de bienes. Esto genera que se presente una baja demanda de bienes públicos y ese sistema de bienes se desvalorice.

“Este es un fenómeno que no solo pasa en la educación, también se presenta en el deporte, la recreación, la seguridad y la salud. Esto reproduce la desigualdad política y económica en el país”, comentó.

De acuerdo con Fergusson, las estadísticas muestran que los estudiantes de instituciones privadas tienen mejor desempeño en las pruebas Saber 11 que aquellos que estudian en lo público. Sin embargo, los mejores resultados están en esas instituciones privadas de alto costo. Lo que significa que la calidad depende de los ingresos de la familia.

Ferguson indicó que el problema de la desigualdad en la educación no solo es económico y va más allá de los incentivos, condiciones materiales y dotaciones de las personas, funcionarios y colegios. Para él, se debe crear un proyecto nacional para valorizar culturalmente la educación pluriclasista.

 “Se necesita un acuerdo político por encima de la polarización, el fomento de una educación pluriclasista de altísima calidad (desde y especialmente en la primera infancia) y preparar mejor a los maestros”, indicó.

El tercer panelista fue Juan David Parra, profesor asistente del Instituto de Estudios en Educación (IESE) de la Universidad del Norte y experto metodológico en evaluaciones de programas educativos en América Latina. Parra centró su intervención en explicar el modelo que estableció la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OECD) sobre las políticas de autonomía y rendición de cuentas escolares.

La premisa de este modelo es que en países donde los centros educativos rinden cuentas de sus resultados públicamente y tienen una mayor autonomía en cuanto a la asignación de los recursos, tienden a obtener un mejor rendimiento de los estudiantes que aquellos que cuentan con menos autonomía.

Según Parra, éste modelo tiene varios cuestionamientos; cómo evaluar el nivel de autonomía que tiene Colombia para rendir cuentas, el nivel de satisfacción que tienen los profesores y realmente qué se está haciendo con los datos o la información suministrada para mejorar y tomar buenas decisiones.

Preguntas

¿Cómo están los incentivos, la calidad y la situación de los profesores en el sistema educativo colombiano?

Moisés Wasserman:

En un círculo vicioso, hay unos datos que no cuadran con la realidad colombiana. No hay una baja demanda de bienes públicos en Colombia. De hecho, hay una alta demanda de bienes públicos tanto en educación básica, media como superior. Por ejemplo, las universidades públicas más grandes están recibiendo el 8 por ciento de las solicitudes, mientras que las universidades privadas llevan 4 años de caída en la matrícula.  Por lo tanto, creo que hay que ajustar esos números en el modelo, si uno va a construir soluciones.

En el caso de los maestros, hay una ruptura en el proceso de evaluación. Ahora no están relacionados los resultados que tienen los estudiantes con la evaluación que se le hacen a los maestros y las instituciones, porque la evaluación de ellos va más enfocada a los procedimientos que aplican en sus métodos de enseñanza. Este es un problema muy serio que se tiene que revisar.

Leopoldo Fergusson:

Para mí, no va a bastar que tengamos una educación de magnifica calidad en el sector público para romper esas brechas que se dan por la segregación social.  Ya sucede la tragedia de quienes se van del sector público al sector privado sin tener mejoras en calidad, pero aun así prefieren irse porque esas instituciones tienen un nombre atractivo o gozan de un reconocimiento social. Este es un tema cultural muy complejo que va a tomar mucho tiempo cambiar.

¿Qué significa educar?

Juan David Parra:

Lo más importante en la educación es generar hábitos y esos hábitos tienen que ver con la convicción que tengan los estudiantes de esforzarse para cumplir ciertas metas. Uno de ellos puede ser el de estudiar y querer aprender. A fin de cuentas, la educación es reflexionar constantemente durante toda la vida y tratar de hacer las cosas de una manera diferente.

¿Cómo educar en la diversidad?

Educar es el desarrollo individual, es el desarrollo de una personalidad y los potenciales que aprenda. Eso lleva a cómo educar en la diversidad. Cuando hablaba de los nuevos retos de la educación, me refiero más a la formación de la persona, que tenga más libertad y autonomía. Creo que eso va a llevar a una muy buena diversidad cultural en la educación.

Finalmente, los panelistas concordaron que la educación, en su esencia, debe ser diversa para todas las personas y no centrarse en un grupo dominante. Al tener más diversidad y analizar diferentes puntos de vista, se aprende más y se construye mejor el conocimiento.

A continuación, podrás ver el conversatorio completo y profundizar en estos interesantes temas: